Cepillar el cabello debería estar incluido en nuestra rutina diaria, puesto que es una acción que estimula el cuero cabelludo, lo oxigena y mejora la circulación del folículo.
Con esta tarea habitual conseguiremos aumentar nuestra salud capilar, fomentando el crecimiento y mejorando la estructura del cabello.
El primer tip recomendado por nuestro técnico es el de desenredar el cabello antes de irnos a dormir, con el cabello seco y con la ayuda de un cepillo apto para ello, nunca utilizando un peine. Para conseguir un resultado óptimo debemos cepillar el cabello por la parte interna del mismo. Esta formalidad aparente no es gratuita, sino que responde a una lógica.
Otro punto indispensable es el movimiento que debemos seguir con el cepillado. Es aconsejable realizarlo de puntas a raíz, deshaciendo primero los nudos formados en la parte más baja del cabello e ir subiendo, para desenredar todo el cabello perfectamente.
Si procediéramos a la inversa, es decir, de raíz a puntas, únicamente conseguiríamos arrastrar los enredos y unirlos en uno más grande en la parte baja del cabello, donde el cepillo quedaría atascado.
Una vez acabado el cepillado completo del cabello, otro de los tips más útiles para evitar los enredos nocturnos es el recoger el cabello en una trenza floja.
¡Incorporando estos pasos en nuestra rutina diaria, mantendremos nuestro cabello libre de enredos y listo para cualquier ocasión!
